Seamos sinceros, esta película no es una crítica despiadada a Wall Street como quieren hacernos creer algunos. Apenas se tocan los problemas fundamentales e inherentes del sistema capitalista, se nombran como quien quiere hacer constar que están ahí, como diciendo que es fruto de la ambición particular de la gente y no de un sistema montado para que algunos se hagan asquerosamente ricos y otros vivan en la miseria. La única crítica que se repite a lo largo de la película y que creo que a más de uno le ha pasado desapercibida es... ¡Si eres pobre es porque quieres! (Interminable mantra que oímos día tras día en los medios que hace que me hierva la sangre).

¿Y por qué leches voto esta película con un 8 entonces?
A los que dicen que esta película es American Pie pero sin gracia... nada más que añadir. Esta película es desternillante de principio a fin. Es una película divertida, directa, desenfrenada, jodidamente loca; y al final ha conseguido lo que yo pretendía cuando fui al cine a verla: reírme como un tarado durante tres horas.