Notoria representación realista, convincente, de detalles muy bien descritos, de la forma de la vida e idiosincrasia de la actual Reina Isabel de Inglaterra, de su familia y del gobierno presidido por el Primer Ministro laborista Tony Blair.

Excelente la actuación e imitación casi perfecta de Helen Mirren, oscar con todo merecimiento.

En general se hace una crítica positiva y relevante del papel político y representativo de la monarquía en la sociedad británica.

Sin duda, es una película que se ve con gusto y alicientes. Preciosa la escena en la que la reina se queda atascada y a solas con su vehículo en medio de un riachuelo rodeada por un amplísimo paisaje de naturaleza reservada, verdaderamente de ensueño.