Una hermandad de hijos no primogénitos en pleno siglo XVIII llevan una vida atareada buscando herederas para poder hacer valer sus derechos. Sin embargo, su magnífico plan se entorpece cuando dos de ellos raptan a las hermanas Kennedy, de las cuales una es menor de edad y es pretendida por un caballero rico.

No es la película de la década, ni lo son sus interpretaciones, pero tampoco lo pretenden, es una película destinada a provocarnos una sonrisa y a hacernos pasar un buen rato. Las diversas situaciones que se van sucediendo dan un ritmo ágil a la película, lo que siempre es de agradecer.

Divertida comedia romántica que nos transporta a una época donde el galanteo, la caballerosidad y las herencia eran el ombligo de su mundo.