Entre los puntos a destacar están las interpretaciones de Tippi Hedren. Esta fue la ultima película que rodó con Hitchcock debido al acoso y el estrés que le sometió, durante este film y Pájaros. Vemos como de forma impecable se va sumiendo en la locura, intentando controlar la situación.
Al igual que con Recuerda, se vuelve a ver una influencia clara de Freud. Sobre todo en la escena de asociación de ideas.
Pero no solo en esto se ve la impronta del padre del psicoanálisis. Uno de los elementos que más se repite en la filmografía de Hitchcock, la figura de una madre autoritaria, cuyo hijo le ruega algo de cariño. Aqui tambien se ve en la madre de Tippi Hedren.
No es la típica película de Hitchcock, donde estaremos expectantes de que se atrapen al villano, es un thriller psicológico que profundiza en una historia de amor y que merece la pena ver.
Ademas que la música de Herman es su mejor acompañante. Una pena que fuese la ultima intervención con el maestro del suspense.
El uso de los planos para causar tensión tambienn es otro acierto