El debut de Kevin Smith es ante todo brillante y realmente fantástico. Y la película es simple (me da a mí que Smith no se maneja con presupuestos grandes).
Y los actores? Pues bien gracias, O´Halloran está bien como el típico gerente mientras que Jeff Anderson protagoniza al típico adolescente bruto, deslenguado y irreverente que su intención es molestar al personal y joder a todo el que pueda.
Son una pareja inmejorable, ni Buddy Movie ni ostias, estos dos tíos son los dos blancos y funciona a la perfección.
Hay momentos realmente fantásticos (es buena la película del año pasado de ese tío) mientras que hay otras que para mí no funcionan tan bien (el partido de Hockey quedan sosón).
Ahora, la película genial, pero se nota que Jay Y Bob son interesantes pero no dan para mucho (en este film salen poquito). Su película me sigue pareciendo totalmente innecesaria.