Media votos
6,3
Votos
645
Críticas
17
Listas
8
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Markus7:
6
5,8
98.311
Ciencia ficción. Comedia
Parodia de los filmes de ciencia ficción de los años 50. Unos platillos volantes procedentes de Marte sobrevuelan todas las capitales del mundo. La población, aterrada, espera conocer sus intenciones. Al presidente de los Estados Unidos, su asesor científico le asegura que serán absolutamente pacíficas. Sin embargo, sus asesores militares le aconsejan que aniquile a los marcianos antes de que sea demasiado tarde. (FILMAFFINITY)
4 de febrero de 2015
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Divertida y única película que caricaturiza el tema cinematográfico de invasión alienígena a la tierra (es decir con epicentro y desde el punto de vista de los esplendorosos Estados Unidos). A pesar de su talante satírico, logra contar con un elenco de actores óptimo, de los mejores de la época, para ser una película paródica (que normalmente suelen contar con actores desconocidos y ser bastante malas).
No solamente dibuja grotescamente a los hombrecillos marcianos y malévolos (caracterizados como bajitos, delgados y cabezones, como viene dictando la tradición ufológica, aunque algo diferentes en la fisonomía) sino que además esboza diferentes personajes tópicos de la sociedad, abanderados, para mi, por Jack Nicholson de presidente de EEUU (siendo como es la película, Nicholson va que ni pintado en el papel de presidente).
El punto cómico de la película, rozando el humor negro en algunas ocasiones por parte de los marcianos, brota de los mismos hombrecillos marcianos en un cúmulo de muy diversas situaciones contra los humanos.
La película reúne, para mi y en tono de humor, el mejor “descojone paródico” hecho de la historia sobre las invasiones alienígenas imaginadas por la ciencia y el cine.
Y, para finalizar, también quiero destacar la acertadísima banda sonora compuesta por Danny Elfman, que al igual que la de Gremlins, tiene un tono que para mi es burlón en justa medida, cuyo hecho le viene como anillo al dedo al filme.
En definitiva, no es una película que debiera salvarse de una quema, pero merece la pena ser vista, porque es divertida y bastante entretenida. Le pongo un 6,75 de nota, ya que un 6 me parece poco, pero soy incapaz de darle un 7, aunque se me queda cerca.
No solamente dibuja grotescamente a los hombrecillos marcianos y malévolos (caracterizados como bajitos, delgados y cabezones, como viene dictando la tradición ufológica, aunque algo diferentes en la fisonomía) sino que además esboza diferentes personajes tópicos de la sociedad, abanderados, para mi, por Jack Nicholson de presidente de EEUU (siendo como es la película, Nicholson va que ni pintado en el papel de presidente).
El punto cómico de la película, rozando el humor negro en algunas ocasiones por parte de los marcianos, brota de los mismos hombrecillos marcianos en un cúmulo de muy diversas situaciones contra los humanos.
La película reúne, para mi y en tono de humor, el mejor “descojone paródico” hecho de la historia sobre las invasiones alienígenas imaginadas por la ciencia y el cine.
Y, para finalizar, también quiero destacar la acertadísima banda sonora compuesta por Danny Elfman, que al igual que la de Gremlins, tiene un tono que para mi es burlón en justa medida, cuyo hecho le viene como anillo al dedo al filme.
En definitiva, no es una película que debiera salvarse de una quema, pero merece la pena ser vista, porque es divertida y bastante entretenida. Le pongo un 6,75 de nota, ya que un 6 me parece poco, pero soy incapaz de darle un 7, aunque se me queda cerca.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Aunque los alienígenas gozan de pillería, impulsividad, ventaja estratégica por mover ficha primero, una mejor tecnología, la confusión de la humanidad y la facilidad de tomar el pelo a los humanos, esa forma de ir a lo bruto les acaba costando, a mi modo ver, la partida y fallando en su intento de invasión, aunque los humanos se salvan por los pelos.