Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de triforme:
8
Drama Años 70. Relato biográfico sobre Frank Serpico, un policía íntegro de principios incorruptibles que, a diferencia de sus colegas, nunca se dejó sobornar, y precisamente por ello siempre tuvo problemas con sus compañeros de profesión y se vio expuesto a situaciones muy peligrosas. (FILMAFFINITY)
3 de septiembre de 2010
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿De qué va?:

Biopic sobre la figura de Frank Serpico, policía neoyorkino de ascendencia italiana que luchó contra la corrupción policial hasta llegar a ser el primer policía en declarar en un juicio contra su gremio en 1971.

Crítica:

Contemporánea de los títulos más famosos de la blaxploitation, Serpico comparte con ellos el estilo típicamente setentero de un género con identidad propia, el policiaco neoyorkino. El 'equivalente' a nuestro cine quinqui nacional llegó apenas unos años antes a América. Las calles están pobladas de delincuentes que trapichean a sus anchas ante la pasividad policial, la corrupción a todos los niveles es asumida como algo natural, y ser un policía honrado te puede poner en el punto de mira de todos.

En este desolador paisaje urbano, Sidney Lumet saca petróleo de un guión bastante tópico y excesivamente maniqueo, que su talentosa dirección convierte sin embargo en una brillante película. El vía crucis del protagonista, interpretado soberbiamente por Pacino, está narrado de manera portentosa, combinando muy bien todas las vicisitudes que pasa en su vida laboral (que incluyen desde el mobbing laboral sistemático a que el inolvidable director Strickland de Regreso al futuro te llame maricón por la cara) con el modo en que éstas le afectan en su vida personal, de poco metraje estas últimas pero muy acertadas todas.

Lumet, gran narrador, representante aún vivo de la vieja escuela, que siempre fue un director invisible donde los haya, se limita a contar la historia, y la cuenta muy bien, además de, como siempre, sacar los mejor de todos los actores que se ponen a su cargo.

Aparte de contar con un Pacino en estado de gracia que en aquellos años daba una lección tras otra, Serpico triunfó porque supo recoger con destreza el testigo del cine de corrupción policial, género bastante habitual en las décadas anteriores, creando una película-denuncia superior en realismo y credibilidad a la mayoría de sus antecesoras.
triforme
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow