Solo viendo que tres directores y que guionistas tiene esta película uno espera la excelencia. Hay tanto talento a los mandos y en la sala de escritura que es muy sencillo dejarse llevar por la ilusión y esperar una obra maestra. Sinceramente, esta cinta se queda tremendamente lejos de todo ello.

La película, que son como tres mediometrajes, cada uno dirigido por uno de estos tres genios, se queda tremendamente a medio gas. Las dos primeras historias son intrascendentes y no entiendo muy bien que es, exactamente, lo que pretendían. La segunda, además, ha conseguido hacérseme larga aún siendo bastante cortita.
Realmente, sólo se salva la última (Y de ahí mi aprobado a la cinta) ya que Woody Allen si mantiene un buen nivel en su historia y se nota que tiene la frescura y el humor tan característico que el suele manejar, así como sus personajes tan estrambóticos y divertidos.

También salvo, en general, al reparto que está entre bien y correcto a pesar de que, en algunos casos, no tenían demasiado con lo que trabajar. Destacan especialmente Nick Nolte y el mismo Woody Allen.

Poco más que añadir, creo que es una película interesante de ver si queréis ver un "experimento" cinematográfico pero no esperéis la calidad que suelen acostumbrar a dar los que estaban detrás de las cámaras, sinceramente, no la vais a encontrar.