Primera película propiamente dicha de Stanley Kubrick, en la que se plantean los problemas que acarrea un "Atraco Perfecto", de forma perfectamente sobria, sin miramientos ni titubeos, con los recursos clásicos del cine negro, y un desarrollo que consigue desesperar al receptor, para concluir de forma elegantemente imperfecta.

Se presentan personajes, situaciones previas, y se pule el plan, y nos lanzamos de lleno a la operación. Los personajes no hacen mal sus papeles, aunque acaban por dar una incómoda sensación de artificialidad, y a veces da la sensación de que lo que tienes delante son un puñado de terminators soltando a toda velocidad la información que han sido programados para soltar. Al margen de eso, dejan claro cuales son sus motivaciones, no son planos, y adquieren profundidad a medida que avanza la película. El atraco consigue que nos desesperemos tratando de saber qué pasará, si todo funcionará como en un principio estaba planeado, etc.

El resultado es una buena película, en la que el inconfundible hacer de Kubrick apenas si se deja ver. Trató de hacer una película puramente de cine negro, y lo consiguió. Funciona en conjunto bastante bien, a pesar de algunas incoherencias que desesperan. El final supone una bonita guinda al proyecto, y le historia queda cerrada y redonda. Recomendable.