Algún estudio pensó que ya que el señorito Lautner era el sueño húmedo de muchas pre-adolescentes, sería la leche montarle una especia de saga Bourne para adolescentes, para su lucimiento exclusivo. Imagino que los directivos del estudio estaban ya frotándose las mandos ante la nueva franquicia que se les avecinaba, y los miles de millones de dólares que les haría ganar el amigo Lautner.

Pero no ha sido así, la cinta ha pasado desapercibida, confirmando que fuera de Twilight, Lautner no tiene ningún interés, y que no es capaz de atraer a las adolescentes que día y otro mojan las bragas con su foto al cine. Si a esto añadimos que es un actor pésimo, y que la cinta es la cosa más infumable que se ha visto en tiempo, puede ser que haya habido suicidios en el estudio.

Entrando a valorar la cinta, decir que el guión es infame, y sobre todo muy incoherente, ya que las cosas que pasan no tienen ningún sentido (también hay situaciones delirantes, como que el malo le diga a Lautner que va a matar a todos sus amigos de Facebook (¡!)). De los actores poco se puede decir, Lautner y Collins son horrorosos, y los secundarios hacen lo que pueden en semejante engendro. Por supuesto no faltan las típicas escenas amorosas de turno, aunque tan castas como las de Twilight, no vaya a ser que el Tea Party alce la voz. En definitva, un despropósito hecho a la medida de Lautner, otro actor del que en un par o tres de años, no volveremos a saber.

P.D.: Deben haberle pagado mucha pasta a Sigourney Weaver para que diga cosas como 'oki doki'.

Lo mejor: El momento en que termina.
Lo peor: Todo lo demás, en especial Lautner y Lilly Collins.

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