Mi título no quiere decir que la peli sea mala, ya que todo lo contrario, es una buena peli pero no está a la altura de sus últimos trabajos (Gran Torino, Million dollar baby, El intercambio o Mystic river). La cinta narra los acontecimientos que tuvieron lugar durante la disputa de la copa del mundo de rugby en Suráfrica durante 1995, y de cómo Mandela la aprovechó, contando con la colaboración del capitán del equipo de rugby, para que los blancos y los negros dejaran de lado el odio que se manifestaban y por fin fueran un pais unido. La peli está bien pero a veces es demasiado didáctica y cuesta adentrarse en la historia, sin quitar que la última media hora de partido me parece excesiva. Morgan Freeman está asombroso en su papel de Mandela y Damon pues está decente al menos. El ritmo puede aburrir a ratos, pero ello no quita de que estemos ante una buena peli, que seguramente no pasará a la historia, pero que en el fondo és muy recomendable. El problema es que Eastwood nos tenía mal acostumbrados.