Dura a más no poder y aterradora a la vez, pero hipnotizadora; desde que empieza hasta que termina Tahar Rahim te hace creer que lo que estas viendo en la pantalla es real. Y a pesar de toda la violencia y de algún personaje del más allá que podría haber sobrado creo que Jacques Audiard realizó una película redonda por donde se le mire, desde la escogencia del protagonista hasta la puesta en escena, la fotografía, la dirección artística, la edición, esta cinta roza la perfección.
Titule mi critica como la Metamorfosis a cambio de mi idea inicial que era "El nacimiento de un monstruo" que me pareció algo exagerada. Lo que quiero expresar es que en la pantalla de forma descarnada sin ningún tipo de trampas este director nos muestra un drama carcelario donde el personaje principal sufre una transformación sustancial en todo su ser, desde sus gestos y movimientos hasta sus más profundos sentimientos en los 6 años que pasa en prisión.
Asistimos como espectadores a ese cambio que se nos hace aterrador pero a la vez fascinante, el protagonista se me asemeja a una serpiente que encanta a su presa con su cascabel y sus movimientos antes de asestarle el mordisco final. Es imposible no relacionar el final de la historia con la ya clásica última escena de El Padrino, donde los dos protagonistas dicen una cosa pero sus gestos nos revelan totalmente lo contrario.
Sobra decir que la recomiendo a ojos cerrados! Excelente.