Tanto padecimiento innombrable. La broma. Old Boy. El maquinista.
Plantea muchas posibilidades o temas de alta alcurnia o toda índole para la reflexión o del personal rumia esta obra pistonuda, ¿para resistir es necesario morir por dentro, porque sueño no lo estoy, loco, para así vivir por fuera, vaciada carcasa, sonámbulo, sepulcro eviscerado, monigote, museo de cera, o no, o lo contrario, para escapar dentro de uno mismo hay que desertar del mundo mondo y lirondo?, ¿hay cierto tipo de personas que viven en la inopia, que siga la fiesta, malacostumbrados por sus privilegios, refugiados en el encanto y la arrogancia, en la educación más exquisita sibarita como adorno, en la más supina ignorancia, en babia, como niños pequeños, engreídos, fanfarrones tontos, incapaces de verlas venir, de calcular el mal voraz, el real peligro, de entender que la vida la realidad es en verdad mucho más atroz o cruel, implacable impávida, de lo que uno imagina o desearía creer/saber?, ¿con la llegada del nazismo se constató finiquitó, punto final, de no retorno, kaputt, la destrucción del mundo de ayer, gran hotel budapest, de la civilización occidental tal como la conocíamos, rip, Homero, y su Ulises, por egregio eximio ejemplo, como máximo estandarte o representante de todo ello, la más alta expresión de ese concepto, obra, la Odisea (y la Ilíada) que paradójicamente, o no (ambas tratan de contar lo mismo pero de un modo completamente opuesto, el proceso es mucho más interior en esta película que en la clásica obra literaria, lo mismo que se podría decir de Joyce frente a Homero, el mundo se ha ido/fue reduciendo hasta desparecer en un riñón, en el hígado o estómago nuestro, jibarizándose sin freno ni remedio), era/es épica bélica, que convierte o convertía en poesía el infierno, en paz y armonía la guerra y el acabose, en gloria la agonía, en aventura y maravilla el destierro y el abandono, igualito a este coso fílmico que metarmofosea, o eso desea, todo el espanto y el sindiós en un crucigrama o partida incruenta, el caos disolvente pulverizador en un orden en frágil y salvador equilibrio?, ¿el humor no sirve para nada cuando vienen mal dadas, es un lujo asiático la ironía, despilfarro, niñería culta sofisticada, bobería, que huye despavorida cuando aparece en escena la violencia, la fuerza bruta, se asusta, se mete debajo de la cama con el rabo entre las piernas, lógicamente, no es tonta, no tiene media hostia, no nos sirve, finalmente, para nada?, ¿no hay mayor padecimiento que la aniquilación del espacio tiempo, de ninguna parte hora en medio, que la negación desaparición de las fronteras o líneas divisorias, de cualquier estímulo o propósito, la soledad como monomanía, manicomio o convento, celda de castigo o aislamiento?, ¿cuando la soledad es completamente insoportable irrespirable la única forma de salvarse es romper amarras, lazos si ni siquiera puedes jugar como un niño, un santo o un loco?, ¿el ajedrez es, por antonomasia paranomasia, el juego serio, una mezcla aleación feliz de inteligencia, sutil, y pelea, callejera, de amable crueldad, la sublimación de todo lo feo o chapucero a través de un frívolo fabuloso mecanismo diabólico pasatiempo, algo propio de generales prusianos aburridos, viva el imperio austrohúngaro?, ¿se parece un huevo en determinados momentos a Mads Mikkelsen este actor alemán de apellido italiano y nombre de dibujo animado?, ¿es el último emperador, el club de los emperadores?, ¿un libro, el objeto y el símbolo, de arena, lo es todo, aleph, un clavo ardiendo, el último asidero, flotador, la tabla del náufrago, trampantojo, espejismo, el único paraíso posible en medio de tanto infierno?, ¿la de Scorsese y DiCaprio, Shutter Island?