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Alemania Alemania · Frankfurt
Voto de emiliocallejon:
7
Drama Walt Kowalski (Clint Eastwood), un veterano de la guerra de Corea (1950-1953), es un obrero jubilado del sector del automóvil que ha enviudado recientemente. Su máxima pasión es cuidar de su más preciado tesoro: un coche Gran Torino de 1972. Es un hombre inflexible y cascarrabias, al que le cuesta trabajo asimilar los cambios que se producen a su alrededor, especialmente la llegada de multitud de inmigrantes asiáticos a su barrio. Sin ... [+]
14 de marzo de 2009
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Anoche tocó sesión de cine, o mejor dicho, de CINE. Porque eso es lo que hace Eastwood, con mayúsculas.
Lo primero a destacar es que no me esperaba una película así, sinceramente esperaba un Mystic River, de haberlo sido quizás me hubiera sabido mejor. Pero no lo es, Gran Torino roza la comedia dramática, y ahí, amigo Clint...te has colado. Los chistes y chascarrillos se suceden a tutiplén de boca del propio Eastwood, sí señores, ese viejo gruñón. Y te hacen reír, ciertamente. Sin embargo, se hace extraño estar en una sala de cine con docenas de personas que le ríen hasta los gruñidos. La primera hora y media de cinta se basa en eso, y entras en una espiral de carcajadas que parece que estés viendo 'La hora de Clint', donde el viejo interpretase inumerables sketches con raíces racistas.
Eso sí, y dicho lo dicho, esta comedia está bien hecha, muy bien dirigida. Porque otra cosa no, pero Clint sabe dirigir. Clint dirige con maestría. Clint dirige con tablas. Clint dirige sin artificios, pero con una contundencia magistral. Tanto me gusta alabar su dirección, como decir que me parece un actor...digamos...normalito. Y ¿porqué me gusta verlo?. Está claro, porque Clint tiene un carisma que se escapa, inabarcable, vamos, que se sale de la pantalla. Es el John Wayne del cine moderno, salvando las diferencias, porque, todo hay que decirlo, Eastwood tiene más registros interpretativos. Pero tienen un nexo, mediocres actores con un carisma aplastante. Eastwood coge un rifle y la sala se encoje.
A lo que íbamos, Gran Torino. El guión es normalito pero está en manos de una buena dirección. Las interpretaciones...¿pero hay más actores? En realidad es un monólogo del 'blanco malo', aunque si destaco a la pequeña 'amarilla' no me excedo, hace buen papel. La fotografía es cojonuda, de lo mejor de la película. Y el final...es el final.
Por cierto, y no menos importante, debería quejarme a las famosas Autoridades Sanitarias por el doblaje al castellano, sobre todo de los pandilleros, es un claro atentado contra el oído humano. Véanla en VO, por su bien.
emiliocallejon
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