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Voto de Vito Corleone:
9
7,5
52.895
Thriller. Acción. Intriga
Neil McCauley (Robert De Niro) es un experto ladrón. Su filosofía consiste en vivir sin ataduras ni vínculos que puedan constituir un obstáculo si las cosas se complican. Su banda la forman criminales profesionales tan cualificados que pueden incluso impresionar al detective Vincent Hanna (Al Pacino), un hombre que vive tan obsesionado con su trabajo que llega a poner en peligro su vida sentimental. Cuando la banda de McCauley prepara ... [+]
29 de septiembre de 2009
5 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un espectacular asalto a un furgón blindado se lleva a cabo una mañana. El plan es perfecto pero algo sale mal: el nuevo integrante del grupo se pone nervioso y provoca una masacre. Esto es algo que Neil, el jefe del equipo, no puede consentir. Pero eso no es todo: cuando van a cambiar los bonos robados por dinero el comprador intenta matarlos.
En tanto, el detective Hanna le sigue los pasos a este particular grupo. Hanna investiga el robo y sabe que se enfrenta a profesionales, que utilizan armas automáticas y que el caso no será nada fácil. Pero él es un sabueso nato y ya va por su tercera esposa. Ambos, policía y ladrón, comparten ciertos rasgos: son perfeccionistas y anteponen su profesión a su vida personal, aún a riesgo de hundirse en su propia soledad...
"Heat" es sin duda el policial de los 90. Una obra magistral con unos personajes bien definidos, algo no muy habitual en una película de acción. Mann se toma el tiempo necesario para trazar una radiografía de estos dos hombres, cada uno a un lado de la ley. Sus problemas personales, inquietudes y emociones se reflejan a lo largo de todo el film, mezclándose con espectaculares escenas de acción. Impresionante es también la fotografía (algo en lo que Mann ha demostrado ser un maestro): esa escena de De niro con Amy Brenneman con las luces de la ciudad de fondo son realmente idílicas.
Secundarios de lujo. Desde los emergentes (Portman, Danny Trejo, Diane Venora) hasta los consagrados (brillante Jon Voight y correctos Kilmer y Sizemore). Y por supuesto la pareja principal: si lo único bueno fuese el diálogo Pacino-De Niro la película ya de por sí valdría la pena. Pero el señor Mann nos regala, además, un guión mas que sólido, donde ambos se lucen, uno como el inquieto polícia y el otro como melancólico ladrón. Implacables e impecables.
Obra cumbre de Michael Mann. Tres horas de cine en estado puro con dos (los más) grandes. La misma historia del policía y el ladrón contada con una profundidad pocas veces vista. Brillante manejo de las pausas y la acción. Y la música. Imperdible.
En tanto, el detective Hanna le sigue los pasos a este particular grupo. Hanna investiga el robo y sabe que se enfrenta a profesionales, que utilizan armas automáticas y que el caso no será nada fácil. Pero él es un sabueso nato y ya va por su tercera esposa. Ambos, policía y ladrón, comparten ciertos rasgos: son perfeccionistas y anteponen su profesión a su vida personal, aún a riesgo de hundirse en su propia soledad...
"Heat" es sin duda el policial de los 90. Una obra magistral con unos personajes bien definidos, algo no muy habitual en una película de acción. Mann se toma el tiempo necesario para trazar una radiografía de estos dos hombres, cada uno a un lado de la ley. Sus problemas personales, inquietudes y emociones se reflejan a lo largo de todo el film, mezclándose con espectaculares escenas de acción. Impresionante es también la fotografía (algo en lo que Mann ha demostrado ser un maestro): esa escena de De niro con Amy Brenneman con las luces de la ciudad de fondo son realmente idílicas.
Secundarios de lujo. Desde los emergentes (Portman, Danny Trejo, Diane Venora) hasta los consagrados (brillante Jon Voight y correctos Kilmer y Sizemore). Y por supuesto la pareja principal: si lo único bueno fuese el diálogo Pacino-De Niro la película ya de por sí valdría la pena. Pero el señor Mann nos regala, además, un guión mas que sólido, donde ambos se lucen, uno como el inquieto polícia y el otro como melancólico ladrón. Implacables e impecables.
Obra cumbre de Michael Mann. Tres horas de cine en estado puro con dos (los más) grandes. La misma historia del policía y el ladrón contada con una profundidad pocas veces vista. Brillante manejo de las pausas y la acción. Y la música. Imperdible.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
-Además de la situación personal de Hanna y Neil, tiene vital importancia para el desarrollo del filme la historia de Val Kilmer y Ashley Judd, como así también las familias de Sizemore y Trejo. Los delincuentes son personas normales que salen a cenar con sus amigos de trabajo y sus respectivas esposas. Y por cierto, también ellos vigilan a los detectives.
-El destino y el honor juegan un papel importante en la historia. Así, cuando Pacino se encuentra en el hospital después de haber ingresado a la hija de su esposa, recibe un mensaje en su busca. Lo lee y se resigna, no es momento de salir corriendo y atrapar al ladrón. Su deber es estar con su esposa, a quien no ha prestado la atención necesaria. Ella lo deja marchar y él sale disparando. De no ser así nunca habría atrapado a Neil...
Lo mismo De Niro: cuando va en el coche con su chica, ya es libre. Está tranquilo y hasta contento. Pero algo le remuerde la conciencia. Tiene que matar a Waingro, no puede dejar las cosas como están. Decide volver y ésto es su perdición.
-Impactante final: el hombre herido estira la mano, busca una mano amiga y solo encuentra la de su enemigo. Le basta, quizás es la mano que buscaba. El verdugo toma la mano, no sabe porqué, pero lo lamenta. "Te dije que no volvería a la cárcel" le oye decir, y asiente, mientras la noche cae en la ciudad...
-El destino y el honor juegan un papel importante en la historia. Así, cuando Pacino se encuentra en el hospital después de haber ingresado a la hija de su esposa, recibe un mensaje en su busca. Lo lee y se resigna, no es momento de salir corriendo y atrapar al ladrón. Su deber es estar con su esposa, a quien no ha prestado la atención necesaria. Ella lo deja marchar y él sale disparando. De no ser así nunca habría atrapado a Neil...
Lo mismo De Niro: cuando va en el coche con su chica, ya es libre. Está tranquilo y hasta contento. Pero algo le remuerde la conciencia. Tiene que matar a Waingro, no puede dejar las cosas como están. Decide volver y ésto es su perdición.
-Impactante final: el hombre herido estira la mano, busca una mano amiga y solo encuentra la de su enemigo. Le basta, quizás es la mano que buscaba. El verdugo toma la mano, no sabe porqué, pero lo lamenta. "Te dije que no volvería a la cárcel" le oye decir, y asiente, mientras la noche cae en la ciudad...