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Comedia
La hermana Marina es enviada a principios de los años noventa a El Parral, un orfanato amenazado de cierre. A su llegada al colegio, los niños están fuera de control, pero Marina capta su atención con su carisma y desparpajo. Los chicos comienzan a mirar con curiosidad a esta nueva monja inmune a sus gamberradas. Sobre todo Valdo, con el que Marina conecta de una manera especial. Cuando Marina descubre las escapadas nocturnas de los ... [+]
26 de junio de 2022
12 de 31 usuarios han encontrado esta crítica útil
SAL GORDA
Chavales de 12 años huérfanos o hijos de familias desestructuradas. Chicos fumadores, choricillos, machistas en ciernes, agresivos, cuñadetes.
Futuros gallos alfa embridados por una Sor Citroen contemporánea que elige el fútbol como instrumento de cohesión y terapia de estas criaturas asilvestradas. (¡cómo no! el fútbol, omnipresente como el propio jefe de la monja, o sea: Dios).
Gags previsibles, sin chispa.
Un personaje absurdo, fallido y carente de toda gracia: el portero del convento.
Un puticlub patrocina al equipo de fútbol infantil. (¿hasta cuándo las gracietas con los burdeles? ¿Cuándo se mostrará lo que realmente son, es decir: campos de concentración, explotación y dolor?)
¿Por qué las comedias españolas siempre están llenas de machitos groseros, bruscos, resabidillos? ¿Somos así?
Todas las monjas están muy bien, en especial Carmen Machi, llena de gracia y humanidad. Es de lejos lo mejor de esta comedieta que sería mucho más interesante con niñas como protagonistas en vez de niños.
Chavales de 12 años huérfanos o hijos de familias desestructuradas. Chicos fumadores, choricillos, machistas en ciernes, agresivos, cuñadetes.
Futuros gallos alfa embridados por una Sor Citroen contemporánea que elige el fútbol como instrumento de cohesión y terapia de estas criaturas asilvestradas. (¡cómo no! el fútbol, omnipresente como el propio jefe de la monja, o sea: Dios).
Gags previsibles, sin chispa.
Un personaje absurdo, fallido y carente de toda gracia: el portero del convento.
Un puticlub patrocina al equipo de fútbol infantil. (¿hasta cuándo las gracietas con los burdeles? ¿Cuándo se mostrará lo que realmente son, es decir: campos de concentración, explotación y dolor?)
¿Por qué las comedias españolas siempre están llenas de machitos groseros, bruscos, resabidillos? ¿Somos así?
Todas las monjas están muy bien, en especial Carmen Machi, llena de gracia y humanidad. Es de lejos lo mejor de esta comedieta que sería mucho más interesante con niñas como protagonistas en vez de niños.