Si ayer me quejaba de que 'Dunkerke' era lenta, hoy me he dado de bruces con 'A ghost story'. Que le hayan dejado el título en inglés ya debía haberme hecho saltar las alarmas, porque suele ser signo de peli mala.

Por poner un ejemplo de lo lenta que es, Roony Mara se pasa más de 5 minutos sentada en el suelo comiéndose lo que parece ser un pastel de carne. Que sí, que la chica tiene unas piernas preciosas, pero me gustaría emplear mi tiempo en algo más edificante. En un par de ocasiones ha pasado algo en la peli, y he vuelto a ella, porque ya se me había ido el santo al cielo y estaba pensando en mis cosas.

Si hubiese pagado una entrada de cine por ver esto, hubiese salido muy cabreado. Si además hubiese ido acompañado y hubiese elegido yo la peli, habría salido avergonzado.

De una cosa no le quito el mérito: hay pocas pelis que haya visto en los últimos meses de las que vaya a acordarme dentro de un par de años, pero de ésta, seguro que me acuerdo, por la visión novedosa que da de los fantasmas.