'2001, una odisea del espacio' terminó tan redonda, que nunca me sentí motivado para ver la segunda parte. Pero el hastío me hizo meterme en un canal de ficción, y terminé por seleccionarla.

Como continuación, no está mal, porque sigue con la historia del monolito, con HAL, y con el mismo mantra trascendental. Es decir, que no se deja nada atrás de la primera película. Sin embargo, mis sospechas resultaron fundadas: es una película que no aporta. Más bien, sobra.

Arthur C. Clarke es un autor muy aclamado en la ciencia ficción, pero para mi gusto, en esta segunda parte patina, y mucho. Cualquiera que tenga unos principios básicos sobre fuerza gravitatoria (las tres leyes de Newton sin ir más lejos) ve el disparate que supone esta nueva entrega. Y para quien no lo entienda se lo explico en la zona de spoiler.

En fin, que distrae, tiene algo de suspense, pero es muy mejorable.