Me decidí a ver esta película porque había oído que era muy divertida e innovadora, pero lo que me he encontrado es una película zafia y vulgar.

Gente de baja condición y menos educación aún. Madre e hija que se insultan constantemente, una Carmina deslenguada y caradura, en un entorno deprimente. Por supuesto los personajes tienen que ser andaluces, para que el acento añada comicidad, aunque siga prolongando el tópico. El culmen llega cuando el marido explica que su vida son los toros, el fútbol, la semana santa y el flamenco ¡Ole, arsa! Luego una amiga cuenta que a Mayra Gómez Kemp lo que más le gusta es el gazpacho y la siesta ¡Arriquitaum!

Si esto es el humor que hace Paco León, por favor, que cuelgue la toga. Ha estado 7 años en una de las series estrellas de la televisión (Aída), y años antes en otro programa humorístico que fue un bombazo (Homozapping) ¿Es que no ha aprendido nada en todo ese tiempo? Podía haberle pedido consejo a José Corbacho.

Pero no todo es malo en esta película. María León está que se sale en el papel de choni de barrio. A ella, felicidades.