George Clooney adapta como guionista y director la novela basada en hechos reales de Robert M. Edsel (que narra como un grupo de militares aliados enviados por Roosevelt en la II Guerra Mundial tratan de proteger y recuperar las obras de arte robadas por los nazis).

Cabe decir que cada personaje de "Monuments Men" está basado en un personaje real, y que muchos de los hechos y consecuencias acontecidos en la película sucedieron realmente (como el reclutamiento de un escultor y un arquitecto norteamericano (que descubrió más de 6.000 pinturas y más de 100 esculturas escondidas por los nazis), la devolución de la mayor parte de las obras de arte a sus países de origen, la relación del director del MET con una empleada de la galería Jeu de Paume, etc.) así que demonizar a este film por la historia de la que parte de base (como si se tratara de un lavado de imagen) no sería del todo justo. Ahora bien, Clooney adapta esta historia de manera regulera tirando a mala, las cosas como son: la estropea todo lo que puede.

El libreto es del todo decepcionante (y más aun sabiendo de las expectativas que había creado esta cinta con esta temática y este reparto coral de cinco estrellas). Es realmente aniñado, simple y manido (desde luego es la cinta más simplona e insustancial que he visto sobre la II Guerra Mundial); "Monuments Men" regala escenas prescindibles al no desarrollarse la trama con ahínco y calado, sus personajes arquetípicos y sus situaciones no profundizan ni tienen matices, el humor (a pesar de ser lo mejor de la trama) siempre camina por la cuerda floja de la bobería (no estamos ante un "Malditos bastardos", ¡más quisiéramos!)... y para rematar el guión siempre que puede tira de tópico tan evidente, falso y simplón como vergonzoso (es difícil ver una película que tire tanto de topicazo nacionalista norteamericano tan artificial, afectado y fingido como "The Monuments Men"). ¡Vamos! ¡que no estamos ante el premio pulitzer de Tony Kushner adaptando "Team of Rivals" para el "Lincoln" de Spielberg precisamente.

El resultado de todo esto es que durante el visionado de "Monuments Men" no se pueda evitar una sensación de trillado y "ya visto", lo que lleva al espectador a una sensación de desgana, desinterés e indiferencia por su trama en muchos momentos.

Aun así, y a pesar de que "Monuments Men" no sea una cinta interesante o digna de ser representativa del Séptimo Arte por el estropicio de su guión, presenta en ella un reparto difícil de obviar... y ellos son los que sostienen el metraje y se encargan de equilibrarlo haciéndolo menos molesto y más tolerable de lo que el guión había preparado para nosotros. Al menos "Monuments Men" acaba siendo un pasatiempo que ni va ni viene, y que se ve igual que se olvida gracias al magnetismo, talento y personalidad de sus actores. Muchos de ellos, auténticas figuras, sacan oro de los momentos más desenfadados y menos tópicos del metraje (John Goodman y Bob Balaban simplemente resultan entrañables con una leve expresión. Y destaca un cálido Goodman que desprende camaradería, amabilidad y cercanía cada vez que se presenta en pantalla. O Cate Blanchett que, a pesar de dar una de sus peores interpretaciones, no puede evitar dejar el mismo gancho que siempre), las parejas de compañeros (Murray y Balaban, Goodman y Dujardin) están bien conformadas e intercambian complicidad y simpatía, llegando a dejar fragmentos de sonrisas... pero siempre gracias a sus interpretaciones.

Curiosamente Clooney es el que parece más descolocado en su papel. No resulta muy convincente, está plano y desganado soltando unas tópicas frases de soltar la lágrima de auténtico mercadillo que ni él se cree (está claro que Clooney se luce de lo lindo en la comedia, pero cuando se toma demasiado en serio nunca llega a funcionar).

En fin. "Monuments Men" al menos goza de una buena banda sonora (aunque a veces se inserte en los pretendidos momentos sensibleros malamente) de Alexander Desplat con un notable tema principal, una correcta iluminación y vestuario, y una realización de planos sencilla y básica (Clooney no demuestra un gusto especial a la hora ofrecer una plasticidad que quede en la memoria en la composición de planos y secuencias) pero en absoluto molesta.

"Monuments Men" se deja ver gracias a la jovialidad y la simpatía de muchos de sus actores, pero en la cinta no sucede nada de renombre (la verdad es que se esperaba de ella mucho más que el tópico ya visto y cuatro gags poco esforzados). Una pena.

Lo mejor: Goodman, Balaban, Murray, su camaradería y como explotan los leves momentos cómicos.
Lo peor: Los tópicos y sus pretendidas situaciones serias tan artificiales.