Un circo de historia, no he podido con ella ni con sus personajes. Lo que más me sorprende, es como a todo el mundo le fascina y a mi, me ha sobrepasado. 

De antemano, mis disculpas si en la reseña me repito o está todo demasiado desordenado, solo quiero desahogarme y quitarme esto de encima de una vez. En un principio, iba con muchas ganas a ver esta historia, pero a medida que iba avanzando, más surrealista me parecía. Seamos sinceros, ¿de verdad alguien cree que dos niños de 14 años van a entrar en la JUMP? Se me ocurren propuestas más interesantes y realistas que ver a dos chavales sin base entrar en la JUMP y sacarme de quicio una y otra vez con la misma cantinela. He sentido cero interés por la trama y mucha vergüenza ajena con sus personajes. Desglosando punto por punto, empezaré por el desarrollo de la historia; este se me hizo denso y eso que la trama es simple y debería fluir sola. No se si es por la narrativa, sus personajes y la cantidad de diálogos sumamente contundentes y aburridos que sueltan o por que la historia en sí, carece de sensatez y realismo. Viven en una simulación. La historia no tiene esencia propia, ni siquiera el humor es bueno, todo es tan abruptamente genérico. Demasiados tecnicismos, hay una sobrecarga de información en la narrativa y sobre todo en diálogos, que a mi personalmente, me atosigaba y me dejaban tumbada. No hay necesidad de ser tan cargante para la historia que me vienes a contar o si así lo requiere, dosificado o véndemelo de una manera más digerible. Lo que me impresiona es que esto tenga más de 60 capítulos, cuando se puede contar perfectamente en unos 25 capítulos, sin necesidad de meter más tramas incensarías y personajes insulsos por doquier. Por no decir que en este anime, el paso del tiempo parece no existir. Literal que pasa casi una década entre tanta turra y el tiempo no pasa para ningún personaje. Físicamente iguales, siguen con el mismo corte de pelo, no tienen barba, no crecen, siguen vistiendo con la misma ropa del instituto. No se han esmerado ni un poco en ese aspecto (bueno, no se de que sorprendo). La seriedad en este anime es tan superficial, no hay dilemas reales ni aprendizajes, simplemente se resuelve con polvo de hadas y a otra cosa mariposa, que la vida son dos días y tenemos que sacar el anime. No puedo tomarme enserio esta historia cuando me lo está diciendo un adolescente que no sabe lo que es pasar por situaciones difíciles en la vida y mucho menos si solo estás cumpliendo esa meta por un puro capricho. Solo saben dar vergüenza ajena hagan lo que hagan. Para ponerle la guinda al pastel, en la segunda temporada (la peor, es infumable) lanzan un mensaje terrible y preocupante, si un público muy joven lo ve y se queda con ese mensaje, estamos en graves problemas. En spoilers me explayare y despotricare, porque se les ha ido la flapa. De verdad, no entiendo como a alguien esto le puede parecer bueno, todavía no llego a entender ni cómo ha llegado a tener un anime. Es de lo más pedante que he visto en mi vida. 

El problema de esta historia, reside en sus personajes. No se porque razón hay tantos personajes, pasamos de una temporada a otra con el doble de personajes y no entiendo el porque, si la mayoría no están aportando nada relevante a la historia. En el caso de otros animes, hay cantidad de personajes que vamos conociendo y tienen peso en la trama junto con una buena profundización de estos. Aquí no tienen alma. Les falta carisma, profundización y una evolución eficiente y completa. Son tan genéricos y sosos, que no consigues generar ningún tipo de apego ni simpatía a los personajes. En el caso de los personajes secundarios, se les utiliza mayormente como recurso cómico y en ocasiones a conveniencia, para solucionar problemas externos que no les pertenecen. Personalmente, encuentro ridículo e innecesario el trato que se les da en el anime. Quédate con los que vayan aportar a la historia, no la cargues de relleno innecesario, la haces mas tediosa. En cuanto a los protagonistas, más de lo mismo, no tienen esa presencia ni personalidad para llevar una historia. Es posible que el hecho de que no conecte con ellos, es por el motivo principal en el que se convierten en mangakas, no lo noto genuino, no se siente que lo hagan por amor al mundo del manga. Es por cumplir otro sueño, más febril que este, si me preguntas. Además, conforme avanza la historia, no noto una evolución en ellos que me haga reflexionar y cuestionarme si he aprendido algo de valor en todo este proceso. Van en modo automático a cumplir esa meta, no profundizan en sus conflictos internos, no se exploran sus inquietudes. Todos sus problemas son banales. Si en una historia, sus personajes no atrapan al espectador ni le hace cuestionarse cosas, algo está fallando.

Mi mayor conflicto es la trama romántica. Esta, es la causa de que los protagonistas se conviertan en mangakas y personalmente, me parece una chorrada. Es preocupante que tu único motivo por el que estás haciendo mangas, sea por cumplir una promesa a tu amor platónico, que para colmo, te trata a su antojo. No tengo palabras para expresar lo furiosa que me pone esta pantomima y cómo pretenden que me crea que hay amor, es sano e ideal. Si prácticamente no interaccionan, ¿Qué amor va haber? Hay más interacción y sentimiento entre dos piedras que entre estos dos. Sois dos payasos. Dejad de hacer el ridículo y actuar como dos personas normales, no tenéis que ponerle un reto a vuestra relación para que funcione. Sois un circo.

Ahora, mi problema con diferencia del anime, es la protagonista. Vaya personaje tan manipulador y abusivo (Continuo con la reseña en spoilers por falta de espacio)