Partiendo de la base de que ni de lejos iban a conseguir igualar a la de Wes Craven del '84 y que de hecho en toda la saga ningún director ha sido capaz de mantener esa elegancia aun no siendo malas películas, creo que está bien ser algo tolerantes. Tampoco creo que nadie quiera una película calcada, que para eso ya está la original.

En principio lo que más me asustaba era la forma de llevar el personaje de Freddy, pero una vez vista la película y salvando las distancias con Robert Englund, al final resulta que es el mejor actor de esta revisión aunque muestre un rostro "distinto". El resto es que son pésimos, y creo que me quedo corto. Quizá se puede reprochar ese intento de ponerle una voz semigutural, algo que realmente nunca le ha hecho falta pues no es el típico personaje que basa el terror en ello, de hecho siempre ha sido bastante jocoso.

La película realmente no me parece del todo mal llevada, creo que la culpa es más bien de los actores tan insulsos que han escogido, y aunque haya partes algo cojas en conjunto no es tan mediocre como había leído por ahí. En todo momento relacionaba las escenas con las de la película original sin necesidad de determinar si son mejores o peores, sino simplemente darme cuenta de que de verdad estaba viendo un remake de Pesadilla en Elm Street. El esquema es muy similar, aunque sacrifica mi parte favorita* por una cutre investigación de la naturaleza de Freddy, asimilando con facilidad el motivo de su muerte, un tema en el que en la original se indaga mucho más con el sombrero y el guante de la caldera del sótano.

Lo que menos me ha gustado es la modernización con el trato de los ordenadores, los blogs y todo ese tipo de recursos basura en una película de este género. La banda sonora está muy bien adaptada en base a las partituras de Charles Bernstein, incluso con la incorporación acertada del tema de Everly Brothers. Y como digo, quitando las escenas "light" sin Freddy de por medio o sin guiños a la original, me parece un remake salvable a la altura de los que se hacen actualmente.

También hay que tener en cuenta que es una película mucho más compleja de trasladar a la actualidad sin dejar de ser un arquetipo del cine del terror. Jason Voorhees, Michael Myers o Leatherface son personajes mucho menos extravagantes que además ni median palabra, algo más simple para un remake actual que un personaje que utiliza su labia o su capacidad para turbar antes que usar las garras.