Los Farrelly producen esta divertida comedia en la que se nota el peso de estos directores, podría haber pasado por una de ellos, por las imágenes, alguna que otra bestialidad, hasta los títulos de crédito tienen la misma tipografía que las películas de los Farrelly.
Un chico trabaja en la recogida de animales para el Ayuntamiento, casualmente encuentra un gato que es de su peluquera.
Comedia un tanto bestia, pero con muy buenas intenciones.
Los actores se lucen, están muy bien dirigidos y ellos lo hacen francamente bien.
La banda sonora es muy buena, la mayoría de las canciones (como en los Farrelly) me son desconocidas, es otra de las muchas cosas buenas que tiene esta película, descubrir una música desconocida, pero ralmente buena.
Una película alegre, vital y con buenos sentimientos, algunos golpes de risa son un poco bestias pero se perdonan porque el resto está francamente bien.