Resulta bastante complicado encontrar películas honestas que te dan justamente lo que te venden y ponen a los críticos oficiales de uñas…porque, imagino, esperaban otra cosa. Son las típicas películas palomiteras hechas para el disfrute total del público de sábado tarde que, en esta ocasión, no tendrá el buen resultado que se merece. Un reparto de campanillas con tres actores de primer nivel dentro del género de acción que se crece con la comedia alocada y poco creíble. La historia, descabellada, tiene más agujeros que un queso gruyere y las escenas de acción las hemos visto mil veces…pero funciona y mucho porque no da respiro y hasta cuesta levantarse para ir al baño.
El director, de nombre demasiado largo, tiene experiencia en este tipo de comedias de acción al servicio de sus estrellas y maneja a la perfección el ritmo y las coreografías que hacen que el público crea lo increíble o lo poco probable.
El enredo de unos ladrones de altura que mienten con gran facilidad y van juntos y por separado, buscando unas piezas históricas de gran valor, sirve de argumento central pero el director, con gran habilidad , introduce temas como la amistad y la lealtad. Jhonson, Gadot y Reynolds tienen química y logran que sus personajes sean atractivos y cercanos con el espectador al que va dirigida la película…saldrá muy satisfecho si sus expectativas están a la altura de lo que van a ver: una honesta y simpática comedia con tres estrellas de actualidad.