Frida Kahlo es todo un símbolo para las mujeres mexicanas ya que a su faceta de excelente pintora se une el hecho de que tras sufrir un grave accidente cuando era joven tuvo que someterse a numerosas intervenciones quirúrgicas que marcaron en ella un carácter de firme determinación.

Sin estar mal a la película le falta un poco de tequila, sal y limón, el film resulta carente de algo de garra que le haga justicia a esta grandísima mujer.

Para un lugar tan especial y variopinto como es México, la película requería un tratamiento más intimista y que mostrara mejor el carácter tanto del país de los mexicanos que la directora Julie Taymor no supo darle.