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España España · Madrid
Voto de lscem:
4
Drama Bud Fox (Charlie Sheen) es un joven y ambicioso corredor de bolsa que consiguió terminar sus estudios universitarios gracias a su esfuerzo y al de su padre (Martin Sheen), mécanico y jefe de sindicato. Su mayor deseo es trabajar con un hombre al que admira, Gordon Gekko (Michael Douglas), un individuo sin escrúpulos que se ha hecho a sí mismo y que en poco tiempo ha conseguido amasar una gran fortuna en el mundo de la bolsa. Gracias a ... [+]
21 de julio de 2010
2 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ambición se define como el deseo ardiente de conseguir poder, riquezas, dignidades o fama. En los colegios occidentales nos enseñan desde pequeñitos a ser ambiciosos: "niño, estudia y trabaja mucho para ser alguien el día de mañana". ¿Y quién puede llegar a ser ese alguien? ¿Oliver Stone, director de esta película y corresponsable de su guión (es un decir)? ¿Charlie Sheen, que interpreta (es un decir) al protagonista?

"Wall Street" trata de la ambición: cómo parasita la personalidad del especulador financiero hasta comerse valores más humanos como la empatía, la honestidad, la ética, la amistad, la solidaridad; cómo envenena los valores del trepa de turno; cómo la ambición de unos pocos destroza la vida de muchos (¿les suena esto último? Sí, es lo que ha ocurrido en la crisis
económica mundial que nos estamos chupando).

Como ven, la propuesta a priori es muy interesante. La pena es que todo se queda en un ambicioso intento de tratado de la ambición, en un querer y no poder. Todo el proyecto se hunde bajo el elemento que lo debería sustentar: el guión. Éste presenta inicialmente lo que se espera sea el hilo central de la trama. Pero al poco rato ese hilo desaparece y es sustituido
por una serie de capítulos intrascendentes y ya vistos en otras películas (que si una nueva chica, que si un nuevo apartamento, que si un ascenso, lo típico...) que supuestamente están desarrollando la personalidad ambiciosa del personaje trepa. Y en el último tramo de la película vuelve a retomarse el hilo inicial y se le utiliza para cerrar la película. Ése es el error estructural más visible, pero otro error claro es que no justifica la decisión final del protagonista; como esa decisión es la que condiciona el desenlace, el guión debería habernos dado pistas.

El personaje principal, alrededor del cual gira toda la película, sólo provoca indiferencia. Está escrito de una forma plana y la pobre interpretación de Sheen agrava aún más las deficiencias. Empieza siendo el arquetipo del trepa, se desarrollo de la manera más convencional y previsible y termina siendo otro arquetipo. El guión no ahonda en los personajes: los 2 principales son arquetipos planos.

Aunque no me guste esta película, recomiendo verla como un elemento de estudio de en qué se queda una propuesta inicialmente interesante si el guión es malo.
Como anécdota, aunque sea culpa de las modas y no de la película, resaltar lo mal que ha envejecido estéticamente la película. Da risa ver la estética de los 80: los peinados, los trajes, la decoración. Parece que han pasado siglos en lugar de sólo 25 años.
lscem
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