Con todo el dolor de mi corazón y reconociendo que cuenta con algún que otro buen e inspirado momento, por muy rendido admirador que sea (que lo soy) del cine de Tarantino, teniendo en cuenta las expectativas creadas ante lo que se nos vendía como una obra cumbre del cine bélico, en la que encontraríamos referencias a “12 del patíbulo”, “Aquel maldito tren blindado” y varias de aquellas películas bélicas de bajo y medio presupuesto que tanto hicieron (y hacen) disfrutar al aficionado al género y que al frente del reparto estaba Brad Pitt, repito, teniendo todo esto en cuenta, afirmo sin ningún lugar a dudas que he quedado sumamente decepcionado, pues esperaba como mínimo si no una obra maestra, si al menos una referencia de género (de esas que de vez en cuando revisitas) y con lo que me he encontrado es con una película bélica mas o menos entretenida (a pesar de lo excesivamente largas de algunas escenas, que supongo estarán rodadas así para satisfacer a la parte de fans de este hombre que babean con interminables diálogos, que si bien hasta ahora yo mismo era un incondicional de los mismos – no babeante -, a partir de aquí los pongo bajo sospecha), con algunos hallazgos marca de la casa, una guapísima Mélanie Laurent comiéndose al resto del reparto y unos bastardillos (Brad Pitt incluido) que no le llegan a la suela de los zapatos al Mayor Reisman y sus muchachos (a mi juicio, lo mas imperdonable y que mas me ha cabreado del film).
En resumen, interesante película bélica en cuanto a la originalidad e ironia de la ucronia, lo acertado y resulton de la utilizacion de diferentes lenguajes en distintas partes de la trama y poco mas (de accion anda imperdonablemente justita), a la que le pesa como una losa las expectativas (quizá debería escribir, mis expectativas) creadas tanto por Tarantino, como por ese sospechoso bombardeo mediatico que en la mayoria de los casos y al mas reconocible estilo Goebbels precede a este tipo de producciones (y que a la vista de los resultados parece ser que funciona de maravilla).