Está mal para empezar.
Mister Russell ha escogido un tema demasiado complejo para un novato. Mejor hubiera sido que empezara con algo más liviano, menos trascendente; pero el que se arriesga... ya sabe. Primero él, que tiene una expresividad parecida a "Terminator" o "Rambo" y que, a lo sumo, se permite alguna trémula lagrimilla; luego la señorita Kurylenko con pocas tablas en esto de actuar, después, una historia con más agujeros que el campo de batalla que aparece en la película y, por último, un folletín romántico que ensarta un tópico tras otro, forman un batiburrillo difícilmente digerible. Si a lo anterior le sumamos unas escenas de guerra propia de los clic de Famóbil, nos encontramos con un producto impropio del mismo actor que en "Gladiator" no lo hizo del todo mal.
Espero que la próxima le salga mejor.