Creo que estamos ante un gran logro de este año, Pinocho y su nueva visión, una preciosa película que no debería pasar desapercibida.

He de decir que cuando la empecé a ver me sentí bastante descentrado, todo me parecía irregular y desproporcional, no sabía de que Pinocho se trataba, cuando me centré, pude ver una película realmente bella.

El diseño es espectacular, desde el mismo principio se siente el gran trabajo, además de bella y preciosa ambientación.

Resulta raro ver este formato de Pinocho, es raquítico y nada que ver con el personaje anterior que Disney nos había vendido, creo que es lo que más me ha costado entender y sentir, pero cuando te acostumbras, todo funciona muy bien.

Pero lo mejor es la nueva visión de Pinocho, un niño tonto que tiene que aprender que el mundo es muy cruel, la guerra y el fascismo, son el entorno político-social de este pobre niño de madera que tendrá que sobrevivir entre toda esta gente mala que le rodea.

La historia tiene un fondo preciosamente humano, y es quizás lo que destaca de todo el gran trabajo que hay detrás de la cámara.

Una preciosa película, no siempre perfecta, pero es una versión inolvidable de Pinocho, realista y de cuento, así es, un cuento para mayores.