Amadeus. Una de las mejores películas de la Historia, seguramente. Una obra maestra del cine.
Uno de esos casos de películas a las que es complicado sacar un solo defecto, porque son una combinación maravillosa de técnica, alma y corazón. Cada momento, cada minutos, cada línea de diálogo tiene una justificación y no está ahí porque sí. Y lo más importante: es una reconstrucción interesantísima de la leyenda negra que rodea a Antonio Salieri y Wolfgang Amadeus Mozart, rivales y maestros de la música del XVIII. y el espectador ni pestañea a pesar de su duración, porque es to es CINE en mayúsculas, dirigido con mano experta por Milos Forman y escrito a la perfección.
Y qué decir de Tom Hulce, maravilloso aunque normalmente eclipsado por el desgarrador torrente interpretativo que es F. Murray Abraham en la piel de Salieri. Pocas veces se han visto interpretaciones tan poderosas en una pantalla. El Oscar que recibió se quedó incluso corto. Es el trabajo de un maestro, de un privilegiado, y se debería enseñar en todas las escuelas de interpretación del mundo.
No pierdan el tiempo. Véanla y caigan fascinados por esta fascinante historia que abarca una de las leyendas más apasionantes de la historia de la música.

Lo mejor: ¿Todo? Es una película prácticamente perfecta.
Lo peor: Nada.