Todavía me estoy partiendo el esternón de la risa con esta cafrada. Y no porque sea cómica -que la califican como tal cosa y la verdad es que no hay mucho de lo que reírse-, sino porque el Wirkola este se queda con el personal con un descaro absolutamente rompedor.

Vale, vale, vale... En el cine de zombis parece existir la máxima de que todo está permitido y por lo tanto no hay que mosquearse si aparecen los Wirkolas de turno y se inventan estas cosas, pero vaya, en el cine -solo utilizo la palabra "cine"- sí que existen ciertos reglamentos que uno no puede saltarse si quiere que le tomen en serio. El primero de ellos es que en la pantalla tienen que suceder cosas con un mínimo de sentido porque al espectador hay que darle, de vez en cuando, un percha de la que colgarse para que te pueda seguir así como justificar lo que venga. Y un relato medio ominoso y una sucesión de sentidos homenajes a otras películas no cubren expediente. El segundo es que si quieres homenajear a un clásico -y en esta peli llegan a aburrirte con tanta nota a pie de página- al menos esfuérzate porque parezca un homenaje y quítate el sombrero con dignidad, o te saldrá una parodia. Y Wirkola quiere mucho a los clásicos, se le nota, pero se dedica a parodiarlos sin compasión.

Luego viene la media hora final. Lo mejor de lo mejor en esta película a la que le cuesta muchísimo arrancar y le sobra, ya digo, casi toda la primera hora metraje: los zombis y el gore tremebundo. Logradísimo, de lo más -de hecho la estética de los nazis de marras es la repera y algunos efectos de casquería son buenos- pero podríamos haber empezado por ahí y ahorrarnos la sucesión de topicazos mal contados e inocentones de antes.

No me extraña que la cinta lleve ya casi un año dando vueltas por ahí y le haya costado encontrar distribución en muchos países... Hay que echarle bemoles para colársela, incluso, al más aguerrido fan del género. Lo cual me lleva a meterme con los distribuidores españoles: la película está muy mal vendida pues no cuela como comedia (el humor del guión es escaso y de vertedero), el trailer la destripa de arriba abajo... ¿y a quién se le ha ocurrido esa cosa papanatas de "Zombis nazis"?

En fin, esta película tiene todas las papeletas para que dentro de diez años algún iluminado le cuelgue el sambenito de "cult-movie".

Yo es que me troncho. Wirkola también.