Ya solo por "El show de Truman" y "El Club de los Poetas Muertos" el señor Peter Weir tiene todos mis respetos.

Pero en "La costa de los mosquitos" no llega a la redondez, ni siquiera está cerca.

Buen planteamiento, me recuerda a "Capitán Fantastic", pero le falta la rotundidad de ésta.

La visión del mundo de Harrison... lástima, se pierde en su propia locura.

¿Qué falla? Que lo que me cuenta no lo veo en la pantalla. Rectifico, sí lo veo en los paisajes, en las construcciones, en los elementos materiales. No lo veo en los personajes.

Los personajes: Lo que ocurre no se traduce en sus gestos, en su aspecto, en su emoción, en su piel. El guion tira p'alante y los personajes quedan atrás.

Lo que acabo de decir se pierde, particularmente, en la actuación de Harrison Ford. No veo el desarrollo de su personaje, no respiramos su transformación, la que le lleva a las escenas finales.

La idea se entiende, porque el esquema de Weir es muy básico: Un autodidacta pretende salirse del sistema, no quiere infectarse con las nocividades de la modernidad, y su idealismo no es más que un peligro para él y su familia.

Se ceba Weir con el reverendo. Éste representa al aleccionador, al manipulador de mentes. El problema es que no nos resulta muy útil para crear un contraste, para entender al protagonista.

Weir nos viene a decir que sólo se puede hacer la revolución desde dentro del sistema... o quizás que no hay esperanza... menos mal que años más tarde hizo "El Club de los Poetas Muertos".


Gracias Weir, tu cine siempre buscó desentrañar la matrix. Un 5, porque a mí también me gusta ser sincero.