Haz click aquí para copiar la URL
Voto de juanantlopez:
8
Musical. Drama. Fantástico. Animación Pink, el cantante de un grupo musical, arrastra desde su infancia una serie de traumas debido a la dura educación que recibió. Cansado de todo lo que rodea su profesión, se acaba refugiando en las drogas como única opción para romper con el muro que él mismo ha creado a su alrededor. (FILMAFFINITY)
12 de agosto de 2009
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La música de Pink Floyd siempre ha sido más que música: ha sido y es una brillante radiografía de la obsesión, de los traumas que nos marcan y de la locura cotidiana. Desde The piper at the gates of dawn hasta este The wall, pasando por el mejor disco de la historia, The dark side of the moon, y principalmente de la mano de Roger Waters, Pink Floyd ha firmado auténticas maravillas sonoras con una plasticidad y un pensamiento tales que parecía inevitable que de ellas saliera este poema visual dirigido por Alan Parker.
Con un gran director y un genio como Waters de maestro de ceremonias, The Wall sigue siendo una de las películas más raras, atrevidas y sugerentes del siglo XX. En ella se nos cuenta la historia de Pink, un rockero en horas bajas atormentado por la muerte de su padre en la II Guerra Mundial y sus fantasías y delirios de grandeza, que lo convierten en un ridículo a la par que abominable líder de corte fascista (genial parodia del nazismo). Todo ello contado fragmentariamente, a modo de puzzle, como reflejo del caos vital y mental del protagonista, interpretado por Bob Geldof, y combinado con pasajes animados donde se despliega todo el arsenal surrealista de Waters.
Aunque la historia no sea un alarde de originalidad, lo más importante de la película de Alan Parker es la fuerza de muchas de sus imágenes, de la cual no se ha perdido ni un ápice en estos más de 25 años que han pasado. Es increíble el talante visionario de muchas de ellas, sugeridas por la increíble música de una de las mejores bandas de la historia.
Aunque en algunos momentos resulte reiterativa e incluso críptica, The Wall es una película para dejarse llevar, para que los sentidos gocen con un disco imprescindible y una película sorprendentemente moderna. ¡Viva Pink Floyd!
juanantlopez
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow