Haz click aquí para copiar la URL
Voto de david panadero moya:
8
Romance. Comedia Jerry y Lucy Warriner están a punto de divorciarse y luchan por la custodia de su perro, Mr. Smith. Antes de que el divorcio se haga oficial, Jerry decide volver con Lucy, pero se entera de que ella va a casarse con un hombre que se ha hecho rico gracias al petróleo. Jerry contraataca anunciando su compromiso con la aristocrática Molly Lamont. (FILMAFFINITY)
15 de agosto de 2011
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
En las propias palabras del señor Warriner, el matrimonio se fundamente en la fe y en la confianza que existe entre los cónyuges, y si ésta se pierde con ella todo. Y siguiendo su premisa, cuando sospecha que su mujer Lucy puede tener una aventura con su profesor de canto francés, ambos tiene una pequeña discusión y deciden divorciarse de mutuo acuerdo. Tras pasar por el tribunal queda establecido que su unión como marido y mujer será nula transcurridos sesenta días. A partir de entonces comienzan unas semanas en las que los actos impulsivos y alocados serán los que guíen las acciones de los esposos: ella tratará de olvidarse de él sustituyéndole por uno venido de Oklahoma, se dividen la custodia de su querido "Mister Smith", y él, después de interferir varias veces de nuevo en el camino de Lucy y ayudarla de paso, también intentará empezar una nueva vida con una rica heredera, pero sólo al final el tiempo, los equívocos, encuentros y enredos serán los que decidan a quién pertenece de verdad cada uno.
Hacía bastantes días que no pasaba un rato tan divertido y entretenido ante la pantalla, pues son tantas las escenas ingeniosas y desternillantes que hay en esta película, que mantienen una sonrisa constante en la cara que aún dura cuando nos despide la estatua de Columbia. Y es que no podía ser de otra manera si la protagonizan dos grandes estrellas del género y la dirige un gran director como Leo McCarey, capaz de distribuir las dosis de humor para mantener su calidad y que éste vaya en crescendo. Como la pareja Warriner derrochan talento, versatilidad y una extraordinaria Bis cómica Cary Grant, metido en la piel de Jerry, e Irene Dunne, en el papel de Lucy, que se compenetran a la perfección para regalarnos momentos hilarantes y con gancho a la par que románticos (contando para ello con un guión inteligente lleno de frases de alta comedia sofisticada).
Excelente película, nominada a varios premios de Academia en 1938 (mejor película, actriz, guión... de entre los que Leo McCarey ganó muy merecidamente el de mejor director), y que supera con creces a la mayoría de comedias que se estrenan en nuestros días.
david panadero moya
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow