Los santuarios no dejan de ser una especie de cárcel o recinto cercado que el gobierno propuso para encerrar y controlar a las Lilys, ya que estos las consideran como armas y peligrosas en potencia. Bien, el anime no hace hincapié en esto, ni en como afecta a la psicología de los personajes, esto simplemente se resuelve en unos 2 capítulos aproximadamente y de manera muy superficial. Y cuando la protagonista pierde a una compañera en una pelea, se derrumba, como es normal para terminar de desarrollar a los personajes, pero solo hace falta que sus amigas le digan que todo está bien para que todos los problemas psicológicos sean olvidados y la protagonista se olvide por completo de la tristeza que tenía. Y para mas inri, el final del anime es totalmente apresurado, a tal punto que la pelea contra el nido de los Huge es simplemente una casualidad del azar ya que este se encuentra dormido y fácilmente accesible, y solo es necesario que la protagonista y su amiga entren y le claven una espada a un robot posiblemente más grande que mi putísima madre.

Aun hay más cosas de las que se olvidan, como que las Lilys controlan el CHARM, que es la energía que usan los Huge, por lo que la sociedad deja de considerarlas humanas, pero eh, no le afecta a ninguna, y a la que le afecta, se le olvida en menos de 2 minutos.