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Voto de Adrián Klas:
6
7,4
32.567
Intriga. Ciencia ficción. Drama
Toni se despierta un día con amnesia y al salir a la calle todo el mundo se pone a grabarla usando sus smartphones. Segundo episodio de la segunda temporada de la miniserie "Black Mirror" creada por Charlie Brooker. (FILMAFFINITY)
7 de agosto de 2014
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Potenciada nuestra natural reserva - cuando no desconfianza - al desconocido, interpreto este episodio como la exhibición más descarnada de la antiempatía a que lleva la cotidianeidad contemporánea de profunda tendencia individualista.
A lo largo del capítulo nos pone espontáneamente de un lado para sacurdirnos, finalmente,con la desilusión; nos hace empatizar con unos y repudiar a otros hasta el momento en que, tribalizados, ni propios ni ajenos resultan totalmente confiables... De últimas, nos enfrenta tanto a ejemplos colectivos de alienación deshumanizante como a la sicopatía del sujeto en tal contexto.
Black Mirror no es una miniserie para cualquiera: verla es exponerse a momentos displacenteros. Pero entre las profundas temáticas que aborda, su tratamiento ficcional, la solvencia de las actuaciones de quienes representan a una de las mejores escuelas actorales del mundo como es la inglesa, y la omnipresente impronta shakesperiana que subyace detrás de la estética neoexpresionista de este producto, su resultado amerita el esfuerzo del espectador por verla y quedar pensando sobre su sentido y sobre el mensaje que envía.
En síntesis, aunque ardua, una serie muy recomendable.
A lo largo del capítulo nos pone espontáneamente de un lado para sacurdirnos, finalmente,con la desilusión; nos hace empatizar con unos y repudiar a otros hasta el momento en que, tribalizados, ni propios ni ajenos resultan totalmente confiables... De últimas, nos enfrenta tanto a ejemplos colectivos de alienación deshumanizante como a la sicopatía del sujeto en tal contexto.
Black Mirror no es una miniserie para cualquiera: verla es exponerse a momentos displacenteros. Pero entre las profundas temáticas que aborda, su tratamiento ficcional, la solvencia de las actuaciones de quienes representan a una de las mejores escuelas actorales del mundo como es la inglesa, y la omnipresente impronta shakesperiana que subyace detrás de la estética neoexpresionista de este producto, su resultado amerita el esfuerzo del espectador por verla y quedar pensando sobre su sentido y sobre el mensaje que envía.
En síntesis, aunque ardua, una serie muy recomendable.