Antes de comenzar la crítica, tengo que aclarar que este proyecto, “Overlord”, se había vendido como una nueva entrega de la saga “Cloverfield (“Monstruoso”). Puedo confirmar, afortunadamente, que esto no es así.

La película ha recibido críticas bastantes positivas (aunque no excelentes) y, de momento, está siendo un fracaso de taquilla (normal si la haces competir con “El Grinch”, que hay que ser iluminado…).

La película es una cinta bélica en el marco de la Segunda Guerra Mundial, y nos introduce en un pueblo francés donde se están realizando, por parte de los temibles nazis, experimentos secretos. Y sí, la premisa ha sido comparada con el videojuego “Wolfenstein” (os recomiendo totalmente el “New Colossus”), como si le debiese mucho a esa fuente, pero ya os digo yo que nada más lejos de la realidad. Tampoco es que ese videojuego inventase la pólvora.

La dirección corre a cargo Julius Avery, y es increíble lo que consigue, sobre todo en las escenas de acción, que lucen fabulosas (el inicio es impresionante), a pesar del ajustado presupuesto (38 millones de dólares, que para una película de estas características es poco). También logra un buen climax, pero quizás haya elementos desaprovechados, y todo podría haber dado más de sí, pero considero que no es cosa suya, por lo que seguramente, su mano sea lo mejor de la cinta que nos ocupa.

En cuanto al guion, cumple, pero tiene un choque de identidades, ya que no sabe si quiere ser una película bélica (ahí cumple, y con creces), una cinta de terror (no da miedo, os lo confirmo desde ya, lo cual es una pena) o un cruce de ambas. En ese aspecto falla.

El inicio de la película es brillante y cargado de tensión, y el clímax final también tiene lo suyo (aunque se desaprovecha el factor mutante), pero en el nudo las cosas se toman con calma, y no coincido, con las críticas que he leído, que el ritmo de la película es trepidante. Si se hubiese mantenido el nivel del inicio, estaríamos hablando de un peliculón, con todas sus letras.

En cuanto a los personajes, aunque estimables y bien dibujados, son clichés con patas, como el novato miedoso pero con principios, el líder borde y apático, el bocazas, el patoso, el nazi cruel… vamos, se cumplen todos los tópicos de las películas de soldados, incluida su evolución. Pero como ya digo, no están nada mal, y se les coge cariño (sobre todo al protagonista).

Respecto al reparto, rostros no tan conocidos, pero que resultan, en conjunto, más que convincentes y correctos. Los efectos especiales y la música también por encima de la media.

Por lo tanto, estaríamos ante una correcta película bélica de terror (aunque esto último discrepo), pero que creo que le falta garra y ambición, y podría haber sido mucho más de lo que finalmente es (tenía elementos de sobra para ello). Una pena. No obstante, si te va el tema, recomendable.

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