Que si es un film sobre la homosexualidad...
No exactamente. Logra centrarse en la relación de pareja (drama romántico) y se aleja del tema cliché de la discriminación que aparece (lógico es un tema que hasta hoy sigue existiendo) pero pasa a un segundo plano. Es una historia de amor, poco importa la orientación sexual.

Que si tiene porno...
Para mí el montaje es una pena pero no por su "exceso de porno" sino porque tiene muchos planos que sobran, e insisto no me refiero a las escenas de sexo (a excepción de la primera que le sobran como 5 minutos) sino a planos insignificantes que no aportan nada. Ejemplos: en la marcha del orgullo gay sobran planos de ellas bailando, en las comidas familiares hay diálogos que aportan y otros que sólo decoran, en la escuela con los niños también. Hay veces que se nota una maduración emocional del personaje y esos planos están bien pero hay veces que sencillamente se vuelve repetitiva e insistente en algo que ya hemos deducido y que no necesitamos que lo continúen repitiendo. Si se le pasa la tijera inteligentemente, le sobran casi como 40 minutos que destrozan el ritmo del film volviéndolo lento sin motivo alguno (aunque seguramente me contradiré en un segundo visionado y más abajo cuando hable de cinema verité).

Que si no es técnicamente bella...
Está filmada con un aire liberal que yo asemejé a Rohmer pero que un crítico inteligentemente comparó con el cinema verité que no resonó en mi cabeza por ser más bien un cine que tiende a lo documental. Pero que define muy bien a este film, ya que en el cine directo el montaje es distinto, se incluyen imágenes que no siempre aportan al desarrollo narrativo; y se tiende a mostrar de forma directa la vida cotidiana de los protagonistas.

Que si todo es azul...
Bueno esto no es un film de Kieslowski pero si es verdad que hay varias cosas sospechosamente azules como las sábanas o las paredes del cuarto.

Que si las actrices son tan buenas...
Pues sí, sorprenden sobre todo por la naturalidad. Lo de Exarchopoulos es tremendo, más que nada cuando llora.

Que si tiene mucho porno...
Esto ya lo había contestado pero vamos de nuevo. No me molesta que el film se esfuerce en mostrar el deseo sexual porque es claro que la relación se sustenta de cierta forma de esa manera y genera un lazo de dependencia más que nada en Adèle y por ende en el espectador que se siente como Cusack o Díaz en la cabeza de Malkovich. El film se desenvuelve como una especie de biopic y está muy logrado a la hora de transformarnos en la protagonista al punto de entender sus sentimientos en propia piel: la escena de la pelea es imponente y la del bar también.

Que si la cámara se estanca en las miradas...
Miradas, me encanta como se construye el relato y la relación en base a miradas desgarradoras (por pasionales, celosas, o por ambas al mismo tiempo).