Una gran comedia estupida que cumple su función a la perfección. Dos chicos viven una experiencia inhumana renunciando a la característica más humana, la racionalidad; en su lugar la reemplazan por la adicción y el vicio. No nos encontramos delante de una obra de arte pero si de una simple comedia cuya intención es entretener al espectador.

Este trabajo va dirigido, en general, a un público más bien joven que se pueda identificar con los dos protagonistas, sus ideas y sus pretensiones. Harold es un contable que trabaja sin descanso y Kumar es un joven indio vago que vive del dinero de su padre. Ambos parecen muy distintos pero comparten el amor por el coqueteo con las drogas y sus efectos.

La pelicula representa en su mayoría la vida universitaria y lo que ello conlleva, fiestas, drogas y mucho descontrol. Es una película que te hace desconectar y simplemente gozar del dulce néctar de las drogas.