Y ésto es lo que me acabo de echar a la cara (mente). Que maldita la hora y bendito el momento. Hacía tiempo que no sentía y disfrutaba de esta manera una película, y mucho más de animación. Puede que desde aquel "Cisne Negro", y qué casualidad, ¿eh, Aronofsky? Pues sí, nuestro Darren compró los derechos de esta película para personificar alguna que otra escena en "Requiem for a Dream" y, ya de paso, hacer una versión más para Natalie Portman. Me parece bien, oye, que yo me enteré hace poco y sigo teniendo a Aronofsky en mi top. ¿Pero hacía falta ponerle Nina, cuando este personaje se llamaba Mina? Comparaciones inevitables con "Perfect Blue", pero ésta es a su vez una adaptación homónima de la obra de Yoshikazu Takeuchi, de la cual han salido algunas películas más.

"Cisne Negro" sigue teniendo el mismo mérito para mí, pero "Perfect Blue" tiene aún más mérito cuando ha servido de tales inspiraciones. Y es que estamos hablando de Satoshi Kon, aquel genio de "Paprika", que murió tan joven y nos dejó con más ganas de hacernos experimentar su visión característica del límite entre ficción y realidad, como ese tal David Lynch sigue haciendo. En fin, así es el cine, y la vida. Y todos seguimos disfrutándolo.