Increíble adaptación de uno de los cómics más esperados de la factoría Marvel: Iron Man y en la que el director Jon Favreau no desperdicia en lo absoluto, dirigiendo un film potente, entretenido y bastante fiel a la original creación de Stan Lee ( quien de paso hace un pequeño cameo).

La productora Paramount no escatimó recursos y en definitiva no defrauda a los más fieles seguidores y en definitiva a quienes gustan de la espectacularidad por sobre todo, con unos efectos especiales de gran factura y sobre todo porque reunió a un reparto estelar atractivo: quién mejor que Robert Downey Jr, para representar al millonario Tony Stark. Prácticamente le queda el papel como anillo al dedo. Y ni que decir de Jeff Bridges, a quien tampoco le queda nada mal aunque se ponga el traje de villano. Gwyneth Paltrow en un rol no tan exigente pero igual se destaca junto al siempre cumplidor Terrence Howard, que lastimosamente "lo sacaron" intempestivamente del proyecto.