Me gusta Jim Carrey. Verdaderamente es un actor como la copa de un pino. Magistral interpretación. Me lo imagino haciendo un Hamlet, sin ningún problema. Tiene madera dramática. Ya no solo es lo buen actor físico que es, sino lo expresivo que es. Ser actor dramático no es fácil, pero ser cómico es aún más dificil. Pues las dos cosas a la vez, lo convierten en un actor único. Afina bien, aunque para mi gusto, aún le falta un pelín más de naturalidad. Si lo logra, habría superado al mismísimo Rober De Niro, o a Robin Williams.
Número 23, es una película con un guión pretencioso, la verdad, pero bien hilado. Agradezco que los guionistas hilen bien y no dejen el guión sin sentido. No obstante, uno se pregunta cosas que no encajan. No es un disparate de película, pero a veces lo parece. Creo que merece la pena verla por la excelente atmósfera que logra en algunas escenas y por la excelente interpretación así como el final bien hilado del guión. Sin embargo...le falta ritmo. La película, aburre un poco con tanto número. Entiendo que hayas críticas negativas para la película, pero a mi, al final me resultó interesante.