Narra las andanzas de un egoísta en sus relaciones y en los asuntos de los demás. Se puede afirmar que estamos ante una road movie vital, aunque el viaje en carretera ocupa poco tiempo. En su estancia en el sur y el norte de los USA y el trayecto entre ambos puntos, Robert Dupea (así se llama el protagonista) se muestra inconformista, caradura e infantil a pesar de su relación amorosa con la incondicional Rayette (encantadora en su patetismo Karen Black).

Sólido en su conjunto, algunos momentos parecen fruto de la improvisacion y lanza pullas a ciertas ideas en boca de mujeres (no es misoginia) : la hippie autoestopista que pasa todo el recorrido con su discurso de la basura, la mierda y lo que apesta el mundo y la gente; y la intelectual que basa su discurso en hundir la integridad y bondad de Rayette, aquí defendida por nuestro protagonista, mostrando un resquicio de amor que al final se va al garete.