Imagínate, dos hombres en un bar, y uno le dice al otro que tiene una idea para una película, Adolfo Suárez: cazador de dragones. Sera la hostia le dice, efectos especiales, slow motion por un tubo y con moraleja patriótica, que hace falta. ¿La verías...? Yo si, suena a chiste...

Me esperaba un producto un poco independiente ,que se reiría de si mismo, y es cine puramente comercial que encima se toma en serio. Vaya..

Lo peor de esta película no son las escenas de acción, que las tiene, ni la maldita camara lenta, que también la tiene, ni siquiera al protagonista en si ,con su carisma desteñido, si no la capacidad que tienen las productoras americanas de ponernos el _ _ _ _ delante de la cara y que encima pagemos por ello. Y eso que Abraham Linncon ni nos va ni nos viene.

En fin, la película es entretenida pese a todo y da lo que promete el título, pero, niños y niñas, si tenéis que drogaros para divertiros, es que es malo.