Parallel Life es un título más en ese maravilloso espectro de thrillers coreanos. Nos han deleitado infinidad de veces con historias imprevisibles, con personajes con infinitos matices, lejos del estereotipo estadounidense. Sabemos que pedir siempre la misma calidad que Memorias de un Asesino, The Chaser, No Mercy o Mother, no es ser demasiado realista.
Sin embargo Parallel Life no decepciona. Peca de pretenciosa, sí, y le cuesta por momentos no confundir.

Un juez, prestigioso y talentoso, ve como su mundo comienza a venirse abajo cuando recibe un llamado. Las amenazas y algunas situaciones trágicas lo llevan a replantearse la vida y descubre que la suya comienza a parecerse mucho a la de otro juez que vivió 30 años antes.
Como Lincoln y J.F.Kennedy, el juez cree estar viviendo una vida paralela y conoce el desenlace de la vida del juez anterior.
¿Se repite la historia?
¿Está escrito su destino?
¿Puede escribir su propia vida?


Muchas vueltas de tuercas, flash backs y cambios de historia a veces es abuso y por eso no rendondea una gran película.

No obstante, si estás lúcido y atento, si el clima es propicio, si no hay interrupciones o inconvenientes que hagan perder la atención, es una interesante propuesta de suspenso. Si queres una cinta light, sin demasiado esfuerzo y compromiso, mejor guardar ésta hasta otra oportunidad.