No se por qué esta película no me interesaba lo más mínimo. La vi el otro día por la tele (grabada, por supuesto, porque sino es imposible aguantar los cortes, pocos pero largos de Cuatro) y resulta que pase un rato de lo más entretenido.
Es tramposa, efectista, bestia, y el guión seguramente no tiene mucho sentido, o ninguno, como he leído en alguna crítica anterior. Pero por lo menos los giros del argumento sorprenden y la identidad del asesino me pilla totalmente por sorpresa. Digamos que se me quedó la boca abierta cuando...
Lo dicho, que en elegancia y sutileza le doy un 0, pero en capacidad de sorpresa y entretenimiento un 8, así que la media clarísima, un 6 ( y es que contra todo pronóstico me ha caído simpática esta película)