Cada vez que una película trata el tema de la venganza pasa lo de siempre, hay que ponerla a parir por fascistoide y no se que cosas más, al margen de todos lo valores cinematográficos que pueda tener. En este caso, al margen del mensaje que se pueda desprender de la película, estamos ante una propuesta realmente atractiva, muy discutible, pero interesante.
Hay quien intentando menospreciarla al máximo la ha comparado con Yo soy la justicia, y la verdad es que no hay comparación. La extraña que hay en ti contiene una carga de profundidad de la que carecía por completo aquella. Neil Jordan ha hecho una película seria, y más reflexiva de lo que pudiera parecer. Desgraciadamente según va avanzando la acción la historia se ve salpicada por numerosas situaciones donde la falta de credibilidad es más que notable, sobre todo en cada unos de los actos violentos en los que interviene la protagonista. Por contra, resulta muy interesante la relación que se establece entre la periodista y el policía, y juntos consiguen algunos de los mejores momentos de la película.
Y la película va transcurriendo así, de forma pausada, interesante y discutible en su desarrollo, espléndidamente dirigida por Neil Jordan, con clase y estilo, y con una potentísima interpretación de la gran Jodie Foster, en un personaje muy arriesgado. Además está secundada por el siempre elegante Terrence Howard. Y como decía así llegamos al final. Un final facilón y tirando a vulgar, que en el último momento, con una discutible decisión, casi echa por tierra todo lo visto anteriormente. Tengo que reconocer que esa acción final (quien la haya visto sabrá a lo que me refiero) me pilló por sorpresa y me dejo bastante impactado y confundido sobre todo lo que hasta entonces me había mantenido interesado.