Ni serán las mejores actuaciones ni los mejores casos pero como serie española para después de comer (con censura incluida), creo que funciona bastante bien. Obviamente nada que ver con Vis a Vis o La Casa de Papel (tampoco creo que tengan el mismo presupuesto!) pero sí es bastante más atractiva que series de sobremesa que llevan miles de capítulos u otras que parecen siempre cortadas por el mismo patrón.