Haz click aquí para copiar la URL
España España · Bilbao
Voto de Fagus:
5
Drama. Romance En el Londres de la posguerra, en 1950, el famoso modisto Reynolds Woodcock (Daniel Day-Lewis) y su hermana Cyril (Lesley Manville) están a la cabeza de la moda británica, vistiendo a la realeza y a toda mujer elegante de la época. Un día, el soltero Reynolds conoce a Alma (Vicky Krieps), una dulce joven que pronto se convierte en su musa y amante. Y su vida, hasta entonces cuidadosamente controlada y planificada, se ve alterada por la ... [+]
7 de febrero de 2018
9 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tediosa, larga, pesada, fútil, sinsentido, simple y hasta cursi.
Como a Day-Lewis le den un óscar por esto, que el último que salga que apague la luz y, como decía un famoso crítico, ''me los corto''.
Un tipo de corazón agrio (según propia definición) y una chica medio mema y poco agraciada, al menos facialmente, nos cuentan su rollo, por cierto bastante pintoresco. Casi todo el tiempo parece un documental o un biopic, como se dice ahora.
Es alarmante para el Séptimo Arte y sus fieles creyentes, que películas de tan escasa entidad como esta no ya se publiciten tan esplendorosa y desvergonzadamente, que a eso estamos harto acostumbrados, sino que se puntúen en portales de fuste como este con tan alta nota, que sean tan positivamente calificados por la crítica especializada y no especializada y lo peor, que mucha gente esté hablando de ella como si fuera algo cuando es muy poca cosa.
Técnicamente lo más importante, el ritmo, es lento hasta la exasperación. Solo le he visto dos cosas buenas en su factura; ante todo la música, que es muy agradable y a veces tan adecuada que parecen las secuencias hechas para la banda musical, como en un videoclip, y no al revés. Y también el movimiento de la cámara, no la fotografía ni el encuadre ni nada, solo el movimiento de cámara que a veces es interesante. Por lo demás ya podemos imaginarnos que la ambientación será buena, que lo es sin más.
La obra también me resulta bastante opresiva y claustrofóbica, sin apenas exteriores, y supongo que ello sin pretenderlo a pesar de las apariciones espectrales y demás.
Y llegados a este punto vamos a dejar alguna otra cosa clara, un sastre o modisto puede ser un genio, como Balenciaga por ejemplo, algo que un inglés no podrá llegar a ser nunca y por tanto es pretencioso de largo el intento, reconocimiento o relato del mismo, pero un diseñador de moda nunca podrá ser un artista. Esto conviene aclararlo. Un modisto como Cristóbal Balenciaga nunca jamás puede estar al mismo nivel de un pintor como Aurelio Arteta, por ejemplo y para entendernos. Ni estética ni artísticamente ni nada de nada. Juegan en diferentes ligas: la artesanía y el arte.
Y hasta aquí llego con la peliculita. Quizá haya sido algo duro en mi crítica y quizá de ello pueda tener cierta culpa un imbécil que tenía al lado comiéndose un saco de palomitas.
Fagus
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow