Película visualmente arriesgada, dura e impactante, sus imágenes nos hacen removernos en el asiento, a ésto también ayuda la banda sonora que es lo mejor del film, realmente espectacular. Nos cuenta una historia donde las drogas nos llevan a la locura y a las drogas se llega a través de nuestros propios infiernos donde el principal es la soledad, la soledad que reina en nuestra sociedad, pero la historia es lo más flojo de la película. Las actuaciones son dignas de mención en donde destaca por encima de todos Ellen Burstyn, realmente escalofriante.
Un filme para tener en cuenta, pero no apta para espíritus demasiado sensibles.